Seguidores

jueves, 31 de mayo de 2012

DORTMUND 80

Cuando la música era música, cuando el directo era directo. El otro día me pasaron este enlace que no puedo dejar de anunciar aquí. Un concierto del año 1980 con un sonido espectacular. No sólo hay que escucharlo, hay que verlo. Para mi, espectacular. Dedicado a todas aquellas personas que han hecho que este grupo me siga sorprendiendo día a día, como Fosi, Manu, el club de fans, la gente de mi generación, a mis padres por soportarlo día tras día, a mis vecinos por aguantar la música tan alta y, en definitiva, para los amantes de la buena música.

viernes, 18 de mayo de 2012

PIPER TO THE END

"Piper to the end" es una canción mágica que nos habla de la nostalgia que siente Knopfler con sus raíces. De hecho, si buscáis bien por YouTube, podéis ver alguna versión de esta canción en sus concierto donde Knopfler acaba emocionado y con lágrimas en los ojos. Esta joya es la pista número 11, la última, del último disco de Knopfler en solitario, Get Lucky.Y este disco es de 2009 (creo que Knopfler está a punto de sacar su nuevo disco), así que es una canción relativamente nueva. Me hubiera gustado poner la versión de estudio, que es más corta, pero por motivos de copyrigh... ya sabéis. Menos mal que Knopfler nunca ha impedido que se graben sus conciertos. "When i leave this world behind me to another, i willo go, and ig there are no pipes in heaven, i'll be going down below...". En fin, que cuando deje este mundo, me iré a otro, y si no hay gaitas en el cielo, bajaré...

Aquí tenéis la letra y la traducción: 

lunes, 7 de mayo de 2012

IN THE SKY

Hay gente que se pregunta la existencia del cielo. Hay quien cree que la conciencia es simplemente un color, o un mueble en mitad del salón. Sólo sabemos del cielo su color, si es que las nubes nos permiten verlo. No existe el cielo gris, sino las nubes que no nos dejan verlo. Lo mismo ocurre con nuestra conciencia. Es azul. Pero a veces está gris. Claro que duele. Pero duele en su conjunto, no en una de sus partes. Esta canción de Knopfler, que no podría tener mejor título, me evoca esos pensamientos. Knopfler se acuerda de su gran amigo Chris White para que lo acompañara al saxofón, y éste nos simula el cielo en sus maravillosas notas. Quiero pensar que las gente que nos quiere está en el cielo, que se acuerdan de nosotros, y que nos juzgan. Quiero pensar que cuando estemos con ellos, nos dirán la razón que tuvimos en algunos momentos, o nos quitarán la que no tuvimos en otros momentos. Por eso, cuando miro al cuelo, veo mi conciencia azul. Porque yo tengo personas en el cielo... y tú también.